Para no equivocarse al momento de elegir una tipografía, existen ciertas reglas…
1. Cada tipografía transmite mensajes
Y es por ello que tenés que hacer una selección a conciencia con base en el estilo o temática del diseño.
2. El tamaño sí importa
Hay tipografías que se inventaron para titulares, y otras cuya misión es conformar el cuerpo de un texto. Tené cuidado al elegir tu fuente, para que no se convierta en un diseño ilegible.
3. No editar fuentes con programas de diseño
Si vas a utilizar negritas o cursivas, usá fuentes que te dan esa posibilidad, no lo hagas editandola con un programa de diseño, con ello vas respetar el diseño original y no tendrás problemas.
4. Cualquiera debe leer con claridad la tipografía
Nunca sabes quién va leer los contenidos que diseñaste, acercalo a todo tipo de lectores, desde los más jóvenes hasta personas de la tercera edad. Seleccioná un buen tamaño de letra y sobre todo, una fuente legible.
5. Alcanzar contrastes
Si utilizas dos fuentes tipográficas en un mismo texto, buscá que no sean tan parecidas, para que puedas lograr un efecto de contraste interesante.
6. Verificá el ancho de cada columna
Si se trata de columnas muy estrechas, la lectura será complicada y lo mismo ocurrirá si es demasiado ancho. Si se pueden leer unas 10 a 14 palabras por renglón, es más que suficiente.
7. Cuidá el espacio
Para que un diseño que integra tipografía sea legible, cuidá el interlineado, si es muy estrecho la lectura se dificulta, pero también tenés que considerar la forma de economizar espacio. Un espacio adecuado logrará que los lectores lleguen hasta el final del texto.
Y la más importante… nunca uses Comic Sans!!
